Nuestro Fundador
No es posible comprender la fundación de una nueva congregación religiosa sin tener en cuenta al hombre elegido por Dios para poner en marcha su obra, pues en la vida de éste encontramos los elementos que inspiraron una obra divina en favor de la Iglesia.
Nuestro padre fundador nació en Puertas Verdes, en el municipio de Matamoros, Tamaulipas, el 23 de Octubre de 1939. Desde pequeño siente la inquietud de la vocación a la vida sacerdotal, por lo que entra en el seminario de Tamaulipas el 30 de Agosto de1957. En 1961 es enviado al seminario de Montezuma, Nuevo México, a cursar la filosofía.
Por motivos familiares pide permiso para pasar un año fuera del seminario al concluir la filosofía. Este año se prolongó y pasó quince años ayudando a su familia trabajando en los Estados Unidos, desde trabajos en limpieza de granjas, hasta trabajar en una compañía dependiente de la NASA y en la companía ferrocarrilera Southern Pacific.
No obstante, no abandonó nunca la idea de la vocación sacerdotal, por lo que en 1976 regresa al seminario de Galveston- Houston y en 1978 es ordenado diácono de manos del Excmo. Señor Obispo John L. Morkovsky.
El deseo de fomentar la buena formación de los sacerdotes, así como el de aplicar correctamente la doctrina conciliar, especialmente en lo referente a la sagrada Liturgia, le lleva a buscar formar un grupo de jóvenes que desearan vivir este carisma. Por ello pide permiso para acudir a la diócesis de Tlaxcala a colaborar en el proyecto de fundación de un sacerdote de esta diócesis. Allí mismo prosigue con sus estudios de teología.
Sin embargo, al surgir algunas diferencias con el sacerdote, decide iniciar un nuevo proyecto de fundación, con los jóvenes que lo siguieran. Y así es como el 28 de Diciembre de 1981, en Ahuacatlán de Jesús, en la diócesis de Ciudad Valles, inicia la fundación de los Misioneros de Cristo Mediador.
En 1984, la Comunidad se traslada a Tampico, invitada por el entonces Sr. Obispo de esa diócesis, Mons. Arturo Szymanski.
En 1985, el 29 de Junio, el P. Servando recibe el orden sacerdotal en la Iglesia Catedral de Tampico, de manos de Mons. Szymanski.